Adiós Puri, hasta pronto

Pues sí, hemos terminado nuestra purificación.
La experiencia ha sido interesante, hemos aprendido un montón. Hemos aprendido a cocinar, hemos aprendido a leer las etiquetas de todo lo que compramos, nos hemos vuelto un tanto paranoicas con respecto a las toxinas alimenticias permitidas por el estado, también hemos tratado de limpiar nuestra vida de cargas: situaciones y personas quenos chupan energía en vez de compartirla para así nutrirnos todos.
En fin, nos sentimos más energéticas, más ligeras y más centradas.
La cuestión ahora es qué pasará con el resto de nuestra vida? Y eso, sólo el tiempo, sólo cada instante lo responderá.
Lo que sí puedo decir es que si aún cabe, repetiremos.